Algunos me dirán que la obstinación no es una pasión, sinoooooo....no sé realmente ni me interesa mucho, para mi lo es. El caso es que ultimamente he lidiado, podría decir, no sólo con mi fastidio (que ya es mucho decir) sino con el fastidio de la gente a mi alrededor, leáse familia, amigos, jefas (casualmente son mujeres) y otras.
Les doy algunos ejemplos, mi jefa, la de la universidad, es tan desordenada, no sé si uno de los requisitos para entrar en tan prestigiosisisisisisima institución, que a estas alturas no sabe a ciencia cierta qué carajo voy a dar, ni como para cuando, es decir, horarios de clases y materia. Me encanta el profesionalismo que inunda los pasillos cada vez que entro. Huele a Academia la vaina!!!. Sin contar los recientes nombramientos para coordinadores, uno es más animal que el otro. Quiero destacar que no lo digo yo solamente, casi que es hartamente conocido, en toda nuestra comunidad de la brutalidad que a gritos demuestran diariamente nuestros ilustres compañeros de trabajo. Pero cuando el jala bolismo impera, la preparación académica-profesional se va de vacaciones.
En mi otro trabajo, porque pa vivir en Venezuela tienes que tener minimo 3 trabajitos para resolverte, nada de pensar ser millonaria, eso es pa otra realidad, en mi caso la virtual. Ok, prosigo, en el otro, mi jefa no puede ser más fálica porque se le acaba el día. Me explico: LLegue cansada a una reunión, por estar todo el bendito dia rodando en el carro, peleando con todos los carritos por puesto que deciden agarrar el próximo pasajero en mitad de 5 de julio o de Bella Vista (los que conocen Maracaibo, saben a qué me refiero). Y pues tan bella me pregunto que de qué estaba cansada, si yo era soltera y no tenía hijos. Me la quede mirando con cara de odio y le dije: Debo entender que tu si estás cansada, por tener la muchachamentazón que tienes y por ser esposa, maestra y todo ese peo!!!!!! QUÉ FÁLICA!!!!! Solamente puedo estar cansada si tengo un marido "contento" y un hogar que mantener de resto soy una carajita jugando a ser grande. No me jodan!!!
Y de mis amistades pues, qué les puedo decir... Vamos a dejarlo en puntos suspensivos, la paciencia se agota.
En fin, la obstinación sigue creciendo. Ahora hasta se ha vuelto proactiva, me mantiene en perenne movimiento, creando nuevos fastidios y manteniendo los viejos.